jueves, 27 de noviembre de 2008

PLD: entre las élites y las masas

25 Noviembre 2008.

PLD: entre las élites y las masas

El PLD abandonó su utopía de transformación social
Escrito por: ROSARIO ESPINAL (rosares@hotmail.com)
De nuevo hay revoloteo en el PLD. Unos culpan a otros de no cumplir con los principios del profesor Juan Bosch. ¡Vaya acusación!
Resulta que el PLD post-Bosch va en su tercer período de gobierno. Bosch apenas gobernó siete meses porque no se llevó bien con las élites: ni la empresarial, ni la eclesial, ni la militar, ni la famosa embajada.
En su época gloriosa fue un innovador de ideas. Sonaba marxista aunque no lo fuera, y quería disciplina leninista para doblegar los ímpetus de sus pupilos de clase media emergente.
En medio de la Guerra Fría, tuvo poca capacidad para traducir en acción gubernamental sus ideas, y fue siempre fácilmente acorralado por las élites. Lo tumbaron en 1963 y nunca más pudo gobernar.
Bosch tampoco mostró gran admiración por las masas. Intentó educarlas políticamente a través de cuentos y alocuciones radiales.
Habló de tutumpotes e hijos de Machepa, pero años más tarde fundó un partido de cuadros, y luego llegó a la conclusión de que no se podía esperar mucho del pueblo dominicano.
La verificación de su pesimismo la constaté en una entrevista que le hice a fines de los años ochenta. Recontó, para ilustrar, una noticia periodística de un accidente automovilístico en la carretera Duarte, donde los lugareños habían robado las pertenencias a heridos y muertos. Para él, aquello era el signo de la degradación moral.
Cuando los peledeístas hablan ahora de haber perdido la mística boschista, ¿a qué se referirán? ¿A la de servir al pueblo como quiso enseñarles el profesor? ¿Al abuso de los recursos públicos tan detestable para el maestro? ¿O a la indisciplina partidaria que se avizora?
Sin dudas, los peledeístas han resultado mejores tecnócratas que los perredeístas. Por eso desde el desvanecimiento de la trilogía caudillista, han gobernado dos de tres períodos, y van por el tercero.
Han gobernado porque a diferencia de Bosch, los dirigentes decidieron echar suerte con las élites y entretener con dádivas y promesas a las masas.
Leonel Fernández llegó al poder con la bendición de Balaguer, el mejor instrumento de las élites dominicanas del siglo 20. Luego, ante la debacle económica de 2003-2004, recibió nuevamente el apoyo de la élite empresarial y eclesial.
En su amorío con las élites, el PLD abandonó la utopía de transformación social. Se convirtió en un vehículo para preservar el orden establecido y articular intereses de los distintos sectores de poder económico y político.
En torno a Leonel Fernández se han aglutinado los últimos remanentes del trujillismo y los cuadros más importantes del balaguerismo: fracciones claves del PRSC, la Fuerza Nacional Progresista, y más recientemente, el Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano.
Ahí se condensan las fuerzas reaccionarias dominicanas, y mientras dure el pacto con esos sectores, no habrá cambios significativos que el PLD pueda impulsar en la República Dominicana. Serán tecno-políticos pero no reformadores sociales. Los burócratas del gobierno, unos más eficaces que otros, combinan esfuerzos por mantener estabilidad macro-económica y crecimiento, con una sed de ejercer poder y consolidar su estatus de nuevos ricos. Las masas, por otro lado, son interpeladas con un vasto clientelismo. Así, el partido dejó de ser célula de formación ideológica de la pequeña burguesía, para convertirse en una maquinaria de repartos de todo tipo.
Atrapado entre las élites que aportan el cojín para gobernar, y las masas necesitadas y desarticuladas que aportan los votos, el PLD se ha acostumbrando a gobernar de manera conservadora.
Los viejos sueños de transformación social se abandonaron por el pragmatismo que dicta la supervivencia política, y en ese proyecto no cabe el utópico profesor Juan Bosch. Por eso ninguno debería acusar a otros de abandonar la mística boschista.
Al descoloramiento ideológico, se agrega ahora la incapacidad de gestar una democracia partidaria que permita canalizar disputas internas y encauzar aspiraciones. El ambiente en el peledeísmo comienza a sofocar y nadie parece tener capacidad de lograr que entre aire fresco.

viernes, 14 de noviembre de 2008

El fenómeno del clientelismo político

El fenómeno del clientelismo político.


Visión de los funcionalistas y de los marxistas
11 September 2006
By María Clara Torres Bustamante
Se revisa aquí la comprensión del fenómeno del clientelismo desde tres enfoques teóricos diferentes. Para los funcionalistas, aquel se define como un contrato diádico de tipo informal y asimétrico, para los marxistas es un instrumento de dominación que tiene por efecto resquebrajar cualquier solidaridad entre las clases subalternas. Para los socio-antropológicos el clientelismo constituye una forma particular de “domesticar” el Estado moderno burocrático.
El clientelismo está analizado según tres diferentes enfoques de las ciencias sociales (funcionalista, marxista y socio-antropológico). Ello nos ayudará a identificar las continuidades y las rupturas presentes en los análisis sobre las relaciones entre el subdesarrollo y el clientelismo, la corrupción y el clientelismo, aquél y la burocracia moderna. El texto examinará en un primer momento la revisión hecha por el autor colombiano Néstor Miranda Ontaneda a las tesis formuladas por los funcionalistas. Analizará en otro momento las ideas expuestas a finales de los años setentas por el propio Miranda Ontaneda desde la óptica marxista y, finalmente, presentará los argumentos centrales planteados desde una perspectiva socio-antropológica por José González Alcantud en la década del noventa. Todo este recorrido nos ayudará a matizar los implícitos que subyacen detrás de las recetas de buena gobernabilidad que asimilan el clientelismo a corrupción, atraso y subdesarrollo de un país.
¿Un contrato diádico? 1
Como lo señalamos arriba, nos referiremos en esta primera sección a la obra de Néstor Miranda Ontaneda pues ella presenta las principales tesis de los funcionalistas sobre el clientelismo político.
Durante los años cincuenta y sesenta del siglo XX, numerosos científicos sociales se concentraron en el examen de las estructuras sociales agrarias del mediterráneo (Grecia, Sicilia, Andalucía) y de América Latina, especialmente México, para estudiar el fenómeno del clientelismo. Los conceptos de patronazgo y de clientelismo se nutrieron de la noción de “contrato diádico” acuñada por los funcionalistas. Desde este enfoque, el “contrato diádico” hacía referencia a un tipo específico de vínculo social que se establecía entre individuos con diferente status: entre una persona que tenía poder, dinero y prestigio y otra que no los tenía. El “patrón” era una persona que hacía uso de su influencia para proteger a otra persona, quien así se convertía en su “cliente” y a cambio le prestaba servicios a su “patrón”. Se hacía énfasis en el carácter asimétrico de esta relación establecida entre personas con condiciones sociales desiguales (Miranda, 1977, 11). Al mismo tiempo, se hablaba de la existencia de un contrato informal que imponía a las partes obligaciones recíprocas y que exigía como mínimo protección y favores de una parte y lealtad de la otra (Miranda, 1977, 4).
Los estudios sobre clientelismo de los años cincuenta y sesenta centraban el análisis en localidades típicamente campesinas. Sin embargo, a principios de los setenta los investigadores empezaron a advertir el hecho de que las comunidades rurales no eran “entidades cerradas” y señalaban la necesidad de ampliar la mirada al tejido de relaciones en las cuales estas micro-sociedades estaban insertas (Miranda, 1977, 7). En la medida en que los analistas cambiaron el foco de atención de la organización interna de las comunidades a las formas como éstas se relacionan con la sociedad “más amplia”, se introdujo el concepto de “broker” o “intermediario”. Esta figura permitía caracterizar a aquellos personajes cuya función básica era la de conectar a los individuos de la comunidad que buscaban mejorar sus oportunidades pero que carecían de condiciones económicas y de conexiones políticas, con otros vinculados a instituciones nacionales y cuyo éxito dependía del tamaño y de la fuerza de su séquito personal. Con esta noción de “intermediario” las relaciones clientelistas ya no estaban necesariamente regidas por un contrato “diádico”, podían incluso ser “triádicas (Miranda, 1977, 9).
Asimismo, la introducción de dicha figura en los análisis permitía discutir la tesis sobre la preeminencia de las relaciones “cara a cara” en el clientelismo, subrayando el hecho de que aquél podía también existir entre personas que no se conocían y que vivían en lugares geográficamente distantes como el centro y la periferia de un país.
Hasta aquí teníamos una comprensión del clientelismo como una relación regida por un contrato informal. Sin embargo, el autor colombiano Néstor Miranda Ontaneda rechazó esta idea de “contrato” y advertía que lo característico del vínculo patrón/cliente era precisamente lo indeterminado de la relación y lo difuso de los bienes y servicios intercambiados, que conducían a una continua dependencia por parte del cliente (Miranda, 1977, 14). Examinaremos ahora examinar las tesis desarrolladas en los años setenta por este autor, quien se apartó radicalmente del modelo funcionalista.
¿Un instrumento de clase?
Para Miranda el clientelismo constituía ante todo un instrumento de clase. Este autor escribía en los años setenta que el estudio de las relaciones patrón/cliente era fundamental para comprender el tipo de relaciones de clase que se establecían al interior de los partidos políticos tradicionales colombianos, calificados de policlasistas (Miranda, 1977, 26-24).
Al explicar las razones que llevaban a un individuo a votar a favor de un partido y en contra de sus intereses de clase, Miranda advertía: “del mismo modo que la capacidad para instrumentalizar personas depende del potencial que se tenga, así la disposición o disponibilidades para ser instrumentalizado, depende no solamente de la privación real del poder sino fundamentalmente del grado de conciencia de clase, en el sentido de la capacidad para discernir a favor de qué clase se está entrando en el juego” (Miranda, 1977, 21).
Así, el clientelismo se explicaba por una debilidad en la “conciencia de clase”, pero también por el hecho de que éste constituía la forma a través de la cual “las clases desposeídas” podían acceder a bienes y servicios del Estado. Este autor consideraba que la escasez de bienes que el Estado capitalista de un país “subdesarrollado” podía ofrecer a las “clases sin poder” los convertía “automáticamente” en fuente de poder para los partidos, que los distribuían a cambio de una retribución en apoyo electoral (27). Se advertía en los análisis de Miranda la idea de una masa inerte e indefensa frente a las manipulaciones de una poderosísima clase política que buscaba solamente auto-reproducirse. Se ocultaba también una cierta comprensión del clientelismo como manifestación del subdesarrollo de un pueblo y de la corrupción de la clase dominante.
Desde esa óptica, el clientelismo constituía fundamentalmente una forma de opresión de clase, un instrumento que tenía por efecto la atomización de las solidaridades entre las clases subalternas y la continua dependencia hacia las élites.
En suma, el debate que polarizó los estudios de los años sesenta y setenta sobre el clientelismo giró principalmente en torno a la existencia o no de la lucha de clases al interior de las sociedades rurales. Algunos autores, como Bertrand Hervieu, consideraban que la comunidad municipal no dejó de ser una “ficción política” en la medida en que los conflictos reales se centraban en la lucha de clases (González Alcantud: 1977: 49). En cambio, otros hablaban de la disolución per se de las contradicciones clasistas al interior de las comunidades rurales, las cuales se suponían ligadas por un fuerte sentimiento de solidaridad. (González Alcantud, 1977: 50). A continuación contrastaremos los planteamientos de los marxistas sobre el clientelismo político con los argumentos esgrimidos en la década de los noventa desde la antropología social por González Alcantud.
El clientelismo burocrático: ¿una forma de domesticar el Estado?
Para el antropólogo andaluz José González Alcantud, el gran número de estudios publicados sobre el clientelismo político ha mostrado exiguos avances teóricos en la comprensión de este fenómeno. Una de las razones que impide profundizar en el análisis es el escándalo moral y la simple condena que el clientelismo provoca entre los investigadores. El autor señala que aspectos como la relación entre el clientelismo y la burocracia quedan todavía sin esclarecerse por parte de los investigadores (González Alcantud, 1997, 16).
Si siguiéramos a Max Weber, la burocracia constituye un aporte esencial en la conformación y racionalización que supone la aparición del Estado. La administración burocrática es considerada la forma más racional de dominación, la más precisa, continua, disciplinada y rigurosa. Según la tipología establecida por este autor para distinguir las formas ideales de dominación y legitimidad, a la legitimidad tradicional corresponde una burocracia patriarcal o estamental, a la carismática una dominación clientelística y a la dominación racional la burocracia moderna (Weber, 1993). Este autor sitúa así la relación patrón/cliente fuera de la estructura burocrática.
Sin embargo, estas ideas contrastan con la persistencia de la dimensión clientelar al interior de los Estados burocráticos en países de América Latina, entre otros. Según González Alcantud, la pervivencia del fenómeno del clientelismo en la relación burócrata/ciudadano está motivada por el deseo manifiesto de las poblaciones rurales de “domesticar” el Estado, introduciendo una relación mucho más humana que el sencillo anonimato (54) y el carácter impersonal del Estado legal- burocrático. Se reconoce aquí un vínculo, habitualmente negado, entre burocracia y clientelismo. Esta idea se refuerza con los hallazgos de un estudio realizado en Sicilia por Michael Korovkin, donde muestra que “los patronos en la comunidad del sur de Italia son los canales a través de los cuales el pueblo pretende acceder al control de las fuerzas impersonales del exterior, fundamentalmente el Estado” (Korovkin, 1988: 122. Citado por González Alcantud, 1997: 58). Más aún, en la España decimonónica de la Restauración, escribe González Alcantud, “los historiadores han demostrado que el prestigio social dependía sobremanera de los “favores” que los patronos pudiesen llevar a término satisfactoriamente, y también del liderazgo ejercido entre la población frente al Estado anónimo (53)”. El clientelismo constituiría así una forma de acercar el complejo y enmarañado “universo burocrático” a la vida cotidiana de las personas.
Además, la tesis de González Alcantud desafía aquellas interpretaciones que ven en la relación patrón/cliente un rezago feudal, un elemento anómalo y “no resuelto” de las sociedades modernas. Según este autor, el clientelismo se diferencia del sistema feudal en tanto supone la igualdad jurídica de los individuos en una sociedad. Aquello que caracteriza el fenómeno clientelar es precisamente el contraste entre la igualdad en el plano jurídico y la dependencia en las relaciones de facto. En sus palabras:
“La realidad respecto a la identificación entre feudalidad y clientelismo es muy otra: las relaciones de vasallaje feudales pueden presuponer la existencia de estamentos jurídicamente infranqueables, si bien señor y vasallo como en el caciquismo rural contemporáneo tengan un sistema similar de prestaciones y contraprestaciones, semejante a la economía del don y que se rige por el principio del “regalo” y “contraregalo” no cuantificables en una economía convencional. Por el contrario, el caciquismo hace coexistir la igualdad jurídica formal de los ciudadanos con la negación en la práctica social de esas relaciones clientelísticas”( González Alcantud, 1997: 63)
El mismo autor muestra cómo en la España decimonónica de la Restauración existía una marcada tendencia hacia la creación de múltiples ayuntamientos y diputaciones, práctica que respondía al impulso de los políticos locales para “aspirar a una parcela significativa del Estado”. La lucha por los recursos del territorio municipal y las contraprestaciones del Estado motivaban esas prácticas: “el control del Estado anónimo figura en el fondo” (64). Más aun, la “base municipalista y provincial del patronazgo caciquil lo aleja de la supuesta pervivencia feudal” (64).
Conclusión
Hemos revisado la interpretación que se hace del clientelismo desde tres diferentes enfoques. Por una parte, resaltamos el énfasis que hacen los estudios de los años cincuenta y sesenta en las relaciones asimétricas, desiguales e informales presentes en el clientelismo, así como la introducción del “intermediario”en los análisis, figura que facilita el vínculo entre comunidad y aquello que llamamos Estado nacional. Por otra parte, subrayamos el tímido pero al fin y al cabo reconocimiento del clientelismo como una forma de redistribución de recursos estatales escasos por parte de Miranda Ontaneda, aunque éste atribuye ve en el fenómeno una forma de “atraso” y “debilidad” del pueblo. Finalmente, resulta particularmente grata la interpretación que hace González Alcantud del clientelismo, quien lo considera un problema eminentemente moderno: al constituir un sistema desigual y vertical de redistribución de bienes estatales, el clientelismo supone la existencia de un Estado y de una burocracia con más o menos recursos y capacidades para regular la vida cotidiana. En últimas, el clientelismo constituiría una forma de poner al alcance de la comunidad y de una manera mucho más “personalizada” servicios ofrecidos por el Estado burocrático, generalmente anónimo, lejano e impersonal. La pervivencia de este fenómeno al interior del moderno aparato burocrático nos habla de una forma particular a través de la cual se establece el vínculo entre la comunidad y el Estado en países de América Latina, motivo de escándalo moral, asimilado sin más a “corrupción”, “atraso” y “subdesarrollo” por las recetas de “buena gobernabilidad” de los organismos de cooperación internacional.
Notes:
1 -tipo de vínculo que se establece entre individuos con diferentes status.
Bibliografía
González Alcantud, José (1997). El clientelismo político, Editorial Anthropos, Barcelona.
Miranda Ontaneda, Néstor (1977), Clientelismo y dominio de clase, Editorial Cinep, Bogotá.
Torres Bustamante, Maria Clara, (2005) “Formas de pensar y experimentar la política: la creación del municipio de San Miguel”, policopiado.
Weber, Max (1993), Economía y sociedad, Fondo de Cultura Económica, México, 10 edición.
La autora es politóloga de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá (Colombia). Ha trabajado en proyectos de desarrollo en la región colombiana del Magdalena Medio y los departamentos de Meta y Putumayo. Trabaja actualmente como investigadora del CINEP en el tema de construcción local y cotidiana del Estado en Colombia.

lunes, 10 de noviembre de 2008

¿Elecciones Compradas?

¿ELECCIONES COMPRADAS? (Por José L. Tavárez Henríquez)


A esta pregunta podría responderse con un sí y un no. Podría decirse que el pueblo dominicano compró la idea de que la reelección de Leonel Fernández era una mejor opción que el regreso a un gobierno perredeísta. En un ambiente altamente polarizado solo había dos caminos posibles, elegir a Miguel Vargas, con todas las implicaciones que esto tenía, o decidirse una vez más por el candidato peledeísta y su modelo de gestión.En un reciente artículo periodístico, el Profesor Jesús de la Rosa señala que “Leonel Fernández ganó las elecciones del 16 de mayo por los haberes de su gobierno en materia económica y en materia de política fiscal; por los acueductos, carreteras, puentes y otras obras civiles que construyó; por el auge y expansión que experimentaron las comunicaciones y las tecnologías de punta; por la remodelación del Aula Magna de la UASD y por la construcción de su Biblioteca Central; por las ciudades universitarias que edificó en Puerto Plata, Santiago y en otras ciudades del país; por los hospitales, escuelas y viviendas que levantó; por las simpatías generadas por su comportamiento hacia los demás: y por su forma de gobernar”.Este análisis, proviniendo de un hombre de larga tradición perredeísta y de una moral incuestionable, deja mal parada a la vocinglería opositora que huye a la autocrítica y continúa con el discurso falaz que fue contundentemente derrotado en las urnas. La mayoría de los/as dominicanos/ as, al poner en una balanza los logros del presidente Fernández y el desastre que han significado las administraciones perredeístas, prefirió comprar su oferta y no la de Miguel y el PRD.En un e-mail que enviara a Guido Gómez, a propósito de un artículo que éste publicara sobre una supuesta campaña mediática y de compra de voluntades, le decía lo siguiente: “Guido, si algo va a retrasar la vuelta del PRD al poder es su incapacidad para auto criticarse. Pensar que las simpatías de Leonel y el PLD dependen exclusivamente de la compra de favores y de opinión pública, equivale a buscar un gato negro en un cuarto oscuro donde no hay ningún gato negro. No se trata de cuánta opinión se vierte por los MCM, si ese fuera el caso Miguel estaría peleando cabeza con cabeza con Leonel o quizá arriba. Si yo tuviera un peso por cada vez que se ha escrito o pronunciado la palabra Sun Land en los últimos 6 meses, no tendría que trabajar en los próximos 60 años.En el citado correo le recordaba actitudes arrogantes como las asumidas por él en Samaná cuando dijo que todo cuanto había era solo para los perredeístas decretando una cacería de brujas que arrasó con la oposición en la administració n pública. Ese mismo aire todopoderoso que los llevó a subestimar incluso a los aliados, que le habían llevado al poder, con quienes rompieron para no compartir el botín que representaban las arcas nacionales. Le recordaba también al inefable Guido que en apenas 4 años duplicaron la deuda externa y ni siquiera pudieron construir la autopista eléctrica Santiago-Santo Domingo, contemplada en la última emisión de Bonos Soberanos. Se criticaba al Metro porque substraía inversión pública, pero la gente observaba cómo se multiplican las obras de infraestructura en educación, calles, alumbrado, carreteras, cultura y deporte con un manejo prudente del crédito público. Esto hacía poco creíble el discurso del PRD y el de su antiguo Secretario de Obras Públicas que, sin hacer ningún Metro o Mega Proyecto, no dejó una sola obra que se pudiera ver en Santiago y en la mayor parte del país.La compra de cédula es un argumento infeliz de quienes buscan justificar su pobre desempeño al quedar 14 puntos (más de medio millón de votos) detrás del hombre a que iban a derrotar. Con una abstención del 29%, la misma o menor que en otros procesos, superados en 27 de 32 provincias y con una pobrísima votación en el exterior resulta poco creíble el argumento de que el proceso fue ilegítimo. Pero el mentís más contundente a quienes procuran empañar la victoria del PLD y las fuerzas aliadas está en el pronóstico cumplido de las encuestas de prestigio internacional. Más que el sonado transfuguismo, la compra de conciencia o de cédulas, firmas como Gallup-Hoy, Asisa Research Group, Clave-Noxa-Cies, Greemberg-Diario Libre y Penn, Schoen Berland escudriñaron en las entrañas de la sociedad para saber cómo pensaba y sentía la gente del pueblo, la misma que iba a decidir con su voto entre continuar con el presidente que les había sacado del abismo en que los metió el PRD o devolverle el poder a quienes la han defraudado cada vez que se les ha dado la oportunidad.

Compra de Conciencia y Elecciones

COMPRA DE CONCIENCIA Y ELECCIONES

Los políticos dominicanos y sus voceros oficiosos que denuncian al PLD y al gobierno por supuestamente comprar opositores ignoran adrede las referencias históricas que demuestran el carácter insobornable del Pueblo Dominicano. En más de una ocasión los dominicanos han demostrado que no hay dinero que pueda torcer su voluntad.

El más reciente capítulo de esa historia todavía está fresco en la memoria de todos: Hipólito y el PRD-PPH fueron derrotados 57% a 34% a pesar de usar más de mil millones de dólares de los Bonos Soberanos, todos los medios de comunicación de Baninter, los militares en la campaña y cientos de millones de pesos en publicidad.

Ese mismo pueblo fue el que prefirió a Hipólito sobre Danilo y Balaguer en el año 2000, aunque no fuera quien hiciera la mayor inversión en la campaña electoral. Pero también desafió a Balaguer en el 1978 y lo derrotó abrumadoramente, no obstante el uso abusivo del poder que incluyó la fuerza pública para intimidar a la oposición.

En el 1962, primeras elecciones libres después de la caída de la tiranía trujillista, la oligarquía representada por la Unión Cívica Nacional, hizo repartos de dinero y comida en procura de derrotar Bosch, pero fueron humillados por un pueblo al día siguiente salió a celebrar, entonando el estribillo jocoso de “le comimos el arroz y votamos por Juan Bosch”.

El sabio pueblo dominicano, si finalmente vota por Leonel como indican las principales encuestas nacionales y extranjeras, no lo hará por raciones de alimentos o Tarjetas Solidaridad, y ni siquiera por empleos en la administración pública. Lo hará porque Leonel ha sabido conducir con prudencia y sabiduría la economía nacional, sacando al país del estado de incertidumbre al que lo llevó la administración perredeísta.

Los dominicanos votarán por Leonel porque es un hombre decente que se ha ganado la confianza y el respeto de los agentes económicos locales y foráneos cuyos capitales se invierten en el país generando nuevos empleos y dinamizando la economía.

La gente votará Por Leonel, especialmente, para evitar que vuelva el caos y la inseguridad que representa el PRD en el poder. Para impedir que gente como Andy y su Escudero sean quienes tracen las pautas económicas del país y se hagan más millonarios con nuevos Bonos Soberanos. Para que Guido no vuelva a decir que los recursos del país son para los perredeístas y que si algo sobrase, también sería de ellos. Y en definitivas, para que el poquito que hemos avanzado no lo retrocedamos como ya nos pasó en el año 2000.

Por estas y otras muchas razones votará la mayoría de nuestro pueblo por Leonel Fernández, sin necesidad de comprar una conciencia que nunca ha estado en venta, la conciencia del pueblo dominicano.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Semblanza del Prof. Juan Bosch

SEMBLANZA DEL PROFESOR JUAN BOSCH
Por José L. Tavárez Henríquez*

Juan Bosch nació en La Vega, República Dominicana, el 30 de junio de 1909 y murió en Santo Domingo el 1 de noviembre de 2001, a la edad de 92 años. El Profesor Juan Bosch es para muchos el más ilustre de los dominicanos del Siglo XX. Se destacó como político, escritor, patriota y ciudadano ejemplar

Nacido del matrimonio de José Bosch y Ángela Gabiño, a muy corta edad comenzó a dar señales inequívocas de poseer una clara inteligencia y una fértil imaginación creadora. Con apenas 4 años se alfabetizó siguiendo las instrucciones de Panchita Sánchez y Anita Decamps, y a los 7 escribió sus primeros cuentos.

Aquel niño, hijo de inmigrantes, creció en medio de limitaciones económicas y diversas adversidades. Sus primeros años de vida coincidieron con la mayor inestabilidad política que registra la historia nacional. Para solo citar un ejemplo, piénsese que entre 1912 y 1915 el país tuvo cinco presidentes e innumerables revoluciones civiles.

Como consecuencia de las tensiones políticas la familia Bosch Gabiño se vio precisada a emigrar a Cabo Haitiano, Haití, donde vivió entre 1911 y 1912. A su regreso se instaló en El Pino de La Vega, desde donde acompañaba a su padre en labores de comercio, comprando huevos y gallinas en la Línea Noroeste para venderlos en la Capital.

El trabajo duro y las precariedades no ahogaron su inquietud intelectual, siempre encontraba tiempo para asistir a la escuela y leer las revistas que su padre y su abuelo recibían desde España. Con pequeños ahorros compraba colecciones de cuentos e historietas, al tiempo que aprendía mecanografía e incursionaba en la lectura de obras mayores tales como el Quijote, El Cantar del Mío Cid, Los Doce Pares de Francia y Orlando Furioso.

Su sensibilidad social, el entorno de miseria y las variadas lecturas fraguaron al artista, al literato y al político. Armado de estas herramientas, y con una fértil imaginación creadora pudo sobreponerse a la cotidianidad asfixiante y convertir en arte el dolor humano. Allí donde el ojo común solo alcanzaría a ver una familia campesina y un bohío pobre en medio del paisaje agreste, Bosch descubría a una mujer víctima de la violencia del marido y de la pobreza que lo perneaba todo. Con su talento artístico ordena ese cuadro desolador para producir su famoso cuento “LA MUJER”.

En esta realidad social y económica, marcada con el signo de la adversidad, hunden sus raíces el compromiso de Bosch con las mejores causas del pueblo dominicano. De allí nace su literatura, su filosofía social e histórica, su militancia política y su moral inquebrantable.

Maestro de maestros en el difícil arte de escribir cuentos, Bosch nos presenta en su narrativa la enorme injusticia social, la pobreza y las vicisitudes del campesino dominicano. Su fina pluma, esquivando los riesgos del panfleto, nos da una obra hondamente comprometida con el destino de los más pobres e indefensos.

Así lo reconoce el crítico literario José Alcántara Almánzar cuando señala:
“Las injusticias sociales que nos arrancan momentos de indignación, nos indignan cien veces más al ser planteadas en los cuentos de Bosch. Por una sola razón: la manera inocente, fatídica, sujeta aparentes juegos del destino, de presentarlas”.

Conocedor nato de la realidad dominicana y sensible como siempre ha sido al dolor humano, no hemos de extrañarnos que entrara en contradicción con el régimen dictatorial de Trujillo, quien primero le maltrata enviándole a la cárcel de Nigua, y luego procura comprar su voluntad política y su talento.

En 1937 toma el camino de un largo exilio que solo terminará con la muerte del tirano en mayo de 1961. Antes de salir del país ya había publicado su primer libro de cuentos, Camino Real (1933) y su primera novela, La Mañosa (1936).

En su exilio, que se inició en Puerto Rico, entra en contacto con el pensamiento de Hostos, cuya obra completa transcribió y dirigió su edición. De esta experiencia se originaron sus obras “Mujeres en la vida de Hostos” y “Hostos el Sembrador” en 1938 y 1939 respectivamente.

En 1939 se traslada a Cuba donde no solo se relaciona con la intelectualidad y los artistas de esa isla, sino que descubre su vocación política. En contacto con otros exiliados dominicanos funda el Partido Revolucionario Dominicano y, fiel a sus principios, trabaja incansablemente para liberar a su país de la Tiranía Trujillista.

Tal vez por aquello de que, “detrás de un gran hombre siempre hay una gran mujer”, en Cuba conoció a Doña Carmen Quidiello, con quien se casó en 1943 aprovechando el premio literario ganado ese año con su cuento “Luis Pie”. Esta cultivada mujer, heroína no siempre visible, acompañó a Juan Bosch en cada tramo de su vida, hasta el último día en este mundo.

La dignidad y decoro del Prócer Vegano son antológicos, jamás transigió con actitudes dolosas ni buscó el bien propio en detrimento de sus ideales. Con valentía desafió la adversidad del exilio sin caer en frustraciones estériles, muy por el contrario supo crecer en el plano artístico, intelectual, humano y político.

Agigantada su estatura de hombre de bien, es llevado al solio presidencial en 1962 por un pueblo ávido de justicia social y soluciones reales a los diversos problemas del país. Los enemigos de la luz lo destronaron a seis meses de haber sido electo, porque percibieron que en él no había dobleces. Entonces, el siempre digno profesor Juan Bosch, prefirió tomar de nuevo el camino del exilio, a convivir con los lineamientos de la caverna militar y política que imponía su voluntad.

Más tarde, en 1973, cuando el partido fundado por él, comenzó a renegar de los mejores ideales y a dar cabida a mezquinos intereses nacionales y extranjeros, prefirió alejarse y transitar un nuevo camino acorde con sus valores y principios. Su talento organizativo, su voluntad monolítica y su honestidad a toda prueba fueron sus armas de combate para crear y desarrollar ese nuevo proyecto político, el PLD, que ha alcanzado el poder en el 1996, 2004 y 2008

Habiendo fundado los dos partidos más grandes del sistema democrático dominicano, escrito más de 50 libros y haber llevado una vida ejemplar como ciudadano y hombre público, honremos a Juan Bosch, cuyo ejemplo y pensamiento seguirán iluminando a los y las dominicanos (as) de buena voluntad.
____________________________
El autor es Filósofo, Psicólogo y Profesor universitario.

Código Procesal Penal

EL CÓDIGO PROCESAL PENAL

Por José L. Tavárez Henríquez*

En la columna titulada “CPP Código Procesal Penal” del periódico Diario Libre de fecha 25/06/08, al responder a una pregunta, el Dr. Guillermo Moreno afirma lo siguiente:

“Muchas de las disposiciones del CPP que sus críticos señalan como protectora de los delincuentes, en realidad son medios para garantizar el respeto de los derechos fundamentales de la persona imputada de un delito, durante la investigación y el juzgamiento. La legitimidad de la sanción o del descargo proviene precisamente de que una u otra provengan de un proceso en el que el imputado tuvo la oportunidad de defenderse y de hacer valer sus derechos y el acusador la obligación de probar por medios legales su acusación.
Entre las disposiciones que se tildan favorables al imputado están: Ser asistido desde el primer acto por un defensor; la prohibición de obligar al imputado a declarar, quien si puede admitir hacerlo, libre y voluntariamente; la declaración del imputado sólo es válida si la hace en presencia y con la asistencia de su defensor; el derecho a no auto incriminarse; el no ser presentado ante los medios de comunicación; la necesidad de una orden judicial para proceder al arresto de una persona, salvo los delitos flagrantes y situaciones asimilables”.

Según Moreno, el Código Procesal Penal garantiza la presunción de inocencia y contienen disposiciones que buscan preservar la vigencia efectiva de ese principio. La pregunta que mucha gente se hace es ¿No se habrá ido muy lejos al salvaguardar este principio, llegando incluso a sacrificar los derechos del agraviado?

Todo parece indicar que el CPP fue pensado desde una realidad con menores índices de delincuencia y sin las características que adopta este mal en nuestro país. Nada incentiva más la comisión de delitos que la tolerancia y la impunidad. Si el delincuente sabe que la condena sería benigna, en caso de ser atrapado, no vería ningún freno en la ley. Lo más común es que las personas ponderen el costo-beneficio de sus acciones y si estos últimos son mayores terminará por poner manos a la obra.

A manera de ejemplo piénsese en el creciente número de delincuentes juveniles que son capturados por la policía. De hecho las bandas de narcotraficantes y para robar carros, radios, cadenas y celulares prefieren a menores, porque las sanciones son menos severas. En ese sentido la minoridad deviene en un incentivo para delinquir, y así no puede ser, como dice Don Pedro Mir.

Frente a situaciones como las violaciones sexuales, con medios de pruebas precarios dada la misma naturaleza de este delito, donde el proceso mismo se convierte en una revictimización de la persona, con sanciones suaves y múltiples vías para que el ofensor recupere la libertad, tendremos entonces menos denuncias, mayor impunidad y consecuentemente más violaciones.

Resulta injusto que un individuo convicto 14 veces sea tratado como si fuera la primera vez que está ante el tribunal. Hace poco me decía una amiga jueza, que había juzgado tres veces a un joven por delitos relacionados con atracos y robos violentos, que al condenarlo ni siquiera podía mencionar el hecho de su reincidencia.

Se hace necesario que se aumente la pena conforme la gravead del delito, llegando incluso a la reclusión perpetua para delitos como el secuestro, asesinato agravado, y terrorismo, entre otros; abrir la posibilidad de que los delincuentes menores de edad puedan ser juzgados como adultos, atendiendo a las características de sus actos; sumar penalidades en los casos en que la infracción implique varios delitos y considerar como agravante el historial delictivo del reo.

Otro aspecto que me preocupa es la figura llamada “Juez de Ejecución de la Pena”. Las prerrogativas de este juez llegan tan lejos que puede decidir sobre la libertad del condenado. Este poder discrecional puesto en las manos de una sola persona, en un medio donde todos tenemos un tío con influencias y donde existen múltiples instancias de presión, incluyendo poderosas mafias del crimen organizado, termina poniendo en la calle a más de un delincuente, sin que las víctimas siquiera se enteren.

Quizá no fue el propósito de quienes elaboraron el CPP, pero se ha convertido en un aliado del delito en nuestro país. En modo alguno estamos diciendo que es la única causa de este flagelo, ni que sea intrínsecamente malo, solo que parece no adecuarse a las condiciones actuales de la sociedad dominicana y por lo tanto debe revisarse.
* El autor es Filósofo, Psicólogo y Profesor Universitario. E Mail: jotatavarez@yahoo.com

miércoles, 29 de octubre de 2008

DE AMOR, DESAMOR Y RABIA


DE AMOR, DESAMOR Y RABIA
AMOR

Los girasoles del patio

Ese gusto por los colores me viene desde lejos
fue aprendido entre las breñas
siguiendo el vuelo del zumbador errante
y el pequeño arco iris pintado en sus alas.

Me gustaba el sol metido entre la lluvia
las hojas amarillas danzando en su caída
el verde del pasto creciendo bajo el tiempo
y la paja herida por el acero brusco.

Tal vez desde entonces amaba la belleza
los colores desprendidos de la tarde
mi instinto viajaba tras tus ojos
y se detenía en los girasoles del patio.


En lugar de la tarde

Si no tuviera que hacer con estas horas
escribiría un poema interminable
para ventilar mis motivos inconfesos
y para ti sin duda.

Pero la tarde me asedia con ruidos
debo esquivar las nubes de palomas
dejar pasar el tiempo inexorable
y pensar, pensar, pensar.

Sí ahora te escribiera
mi poema estaría lleno de estudiantes
deportistas corriendo a todos lados
y hojas amarillas danzando a la deriva.

Como ves
mi poema sería un mosaico de impresiones
con datos inconexos del planeta
y estarías allí en el tumulto.

Por eso
como no sé qué hacer con esta tarde
pienso en ti, y si supiera
tú serías mi poema, estoy seguro.


Redes transparentes más allá del sueño

En el silencio cosechado más allá del tiempo
donde la lluvia es sencillamente ociosa
y las estrellas son rótulos colgados en los muros.

Un mundo producto del devenir constante
sacado de la nada
regido por coordenadas nuevas.

Allí donde abro los ojos a otro espacio
a tiempos y a voces inauditas
donde el griterío se transformó en cascada.

Allí llegó tu nombre posado en mis espaldas
para cruzar conmigo las fronteras
cantando su canción de siempre.

Allí tu nombre ordena las cosas a su paso
a ratos se esconde en mis instintos
y teje redes transparentes más allá del sueño.


Un motivo cercano

Esta mañana sorprendí un galope oscuro
eran burbujas de café subiendo por la greca
olores mañaneros despedazándose entre el humo
y un canto de utensilios lo llenaba todo.

Era feliz recuerdo claramente
veía mi rostro en los espejos negros
hacía remolinos con las sombras
y pensaba en ti dormida todavía.

Regresaba a mi cuarto compartido
la noche se había escapado casi toda
se iba por las ventanas de tu almohada
y el motivo despertaba entonces.
Tu sonrisa

Hoy vi tu sonrisa
la ciudad se iba durmiendo
la gente pasaba aprisa
y el sol era ya sólo un recuerdo.

Hoy vi tu sonrisa
era un día como otros tantos
la rutina iba trepándose a los árboles
y la trivialidad se hacía palabra cotidiana.

Hoy vi tu sonrisa
caminé entre ex-alumnos y saludos
llovían los rostros antes vistos
el pavimento pasaba sereno y uniforme.

Hoy vi tu sonrisa
la realidad se volvía tangible
el mar lejano era una mancha fosforescente
y habría gaviotas en algún lugar del mundo.

Hoy vi tu sonrisa
ranas hacían el amor en las lagunas
las babosas subían por el tiempo con desprecio
y alguna mujer estaría pariendo en su bohío.

Hoy vi tu sonrisa
las garzas seguían pasando por el cielo
quizá habría lagartijas escondidas
y los autos se oían veloces a lo lejos.

Hoy vi tu sonrisa
sonaban disparos en los barrios
las lágrimas eran parte de las cosas
y habría pedazos de sueños en las calles.

Hoy vi tu sonrisa
como una flor sobre las cosas
ventana abierta ante mis ojos
nota limpia traída por el viento.


Hay un verso en mi silencio

Hace mucho tal vez que no le escribo
sin embargo mientras mi pluma duerme
van surgiendo poemas en la calle
versos que huelen al sudor de la fatiga.

No le escribo, y sin embargo
mi corazón habla de ella en los latidos,
lo cotidiano se teje siempre en su presencia
y mis amigos arman estrofas con su nombre.

En el silencio se gestan poemas virginales
trozos que saltan a la vida vueltos besos
manos enlazadas creando fantasías
y detrás del ring ring la voz celeste.

Su sombra es tan cercana en estos días
que mis células son partes del poema
ella surge detrás de cada cosa
y hay un verso también en mi silencio.


Bienvenida

Bienvenida a mis manos bienamada
caminante saltarina de mis poros
dueña de la flora brumosa de mi cuerpo
de la espuma dormida entre mis manos.

Bienvenida gaviota de alas blancas
dueña del viento y lo azul puesto en mi cielo
barredora implacable de las nubes
negadora de espinas y de nieve.

Llegas mansa, la paz viaja en tu cuello
eres así, como la lluvia fresca
fértil en el amor y la ternura.

Viajera que haces florecer mi sangre
eres como brisa entre mis pensamientos
dueña de mis secretos y esperanzas.

Era

Era yo un camino de piedras dormidas
un trazo violento dejado en el suelo
tiempo amontonado como polvo estéril
los sueños hervían para morir luego.

Era un camino lejos de la sangre
lejos de la vida, el agua y la risa
iban mis amigos callados y tristes
bajo tres estrellas, rotas, desteñidas.

Era el pasado, todavía sin ti
marcha bajo el eco dolorido y sordo
todo previo a lo bello y tierno
anterior también a rosas y besos.

Luego en vez de piedras estaban tus ojos
tu piel abría camino a mis sueños
la vida trepaba hasta tus colinas
y tus manos iban recogiendo estrellas.

DESAMOR
Se hace la ternura

Se hace la ternura
surge donde quedó su ausencia
donde sus manos grabaron huellas en el aire
y en el vacío por donde huyó su pelo.

Es una ternura para armar su sombra
desprender del viento su perfume
restituir lo amarillo a su mirada
y retener el eco de su andar frecuente

Se llenan las manos de ternura
fluye como miel dulce-salobre
hecha de ausencias y de esperas
y de sueños nacidos a su sombra.

Sobre la espalda el cadáver de lo triste
sin embargo me atraviesa la ternura
va cantando en mi pena la ternura
mi cama se hace tierna, por si vuelve.

Como la lluvia

Esta lluvia que lo grisea todo
hunde sus cristales en mi piel
avanzo apartando su telaraña viva
rompo sus hilos y se recomponen a mi espalda.

Sólo existe la lluvia en todos lados
posada serenamente donde estuvo la tarde
no hay casas, ni árboles, ni calles
el pensamiento es solo lluvia derramada.

tu imagen va surgiendo de las aguas
como humedad de lágrimas salobres
te vuelves infinitamente gris
y te fundes con las brumas de la tarde.


Como la tarde

Hoy es una de esas tardes
sin paredes donde fijar la vida
con un techo azul colgado de las horas
con una brisa holgazana y tímida.

Es una tarde así, como tantas
poblada de conversaciones triviales
hombres anudándose el calor en la garganta
mujeres amaestrando colores en el rostro.

Hay mariposas trazando zigzag en amarillo
el sol hundiendo sus dardos en la espalda
el absurdo convertido en ecos electrónicos
la inutilidad hecha sudor sobre la frente.

Es una tarde así desde hace un rato
de corazón pesado con entrañas torpes
transcurre lenta entre minutos muertos
los autos le rebasan y luego se pierden

Camina sobre el filo mortal de los segundos
con los brazos desnudos extendidos
sin duda va buscando compañía.
Mi mano marcha aún como la tarde.

No estás, es todo

Si no fuera el pasado tan cruel en estas horas
si la lluvia detuviera su andar triste
sobre el cristal de mi ventana
si el rugir del viento se perdiera en tu risa fresca
si hoy fuera ayer!

Pero no estás, es el hecho
tu recuerdo resbala sobre mis manos húmedas
tu risa es eco petrificado en mis oídos
no estás, es todo.

Sin embargo, pueblas el dolor de estas ausencias
estás en los fantasmas de la casa
en la muerte de estas noches lentas
y en la esperanza incierta de encontrarte.

Cuando las palabras son tan frágiles

Cómo decirte amada que te quiero
cuando las palabras son tan frágiles
y envejecen al estrenar sus alas.

Cómo hacer que aceptes el te quiero
si a veces mis palabras son espadas
o como enjambre de flechas te laceran.

Cómo convencer tu mirada triste
cuando un portazo resume mi discurso
y tus palabras resbalan en mi espalda.

Sin embargo
insisto en decirte que te quiero
aunque el discurso tropiece con mil ruidos
y los fantasmas asusten mis palabras.

Si prefieres
no aceptes mi te quiero todavía
déjalo abrirse paso en la melaza
y vagar inseguro bajo sombras.

Si prefieres
no abras las puertas de tu alma
que mi amor quede fuera, bajo lluvias
y una mañana sin nubes dale asilo.
RABIA

Canto para una súplica amarilla

Oh señor de diez años!
dueño del ruido de la calle
auditor entre los desperdicios
caballero andante en la desesperanza.

A veces yo quisiera ser tú
para dormir tirado en un portal cualquiera
ser amigo cercano de las ratas
compartir el secreto de todos los insectos.

Debe ser muy divertido, sabes?
hurgar en los montes de basura
desenterrar tesoros de alimentos
y regresar a ningún sitio cada tarde.

Con un destino tan cierto en el segundo próximo
un destino hecho de lo presente
polvareda y calle, calle y polvareda
insultos y bocinas, insultos y bocinas
semáforos y agua jabonosa
brazos metálicos negando sobre los parabrisas
y aveces la lástima de níquel cayendo al pavimento.

Con el peligro próximo como una camiseta
es para que cantes jubiloso
dando gracias al señor de lo presente
vivan los buenos días y corbatas!
loada sea la ropa planchada y olorosa!

Porque tú con los otros eres dueño de las calles
inventaste la tristeza de los ojos
resumiste miseria y desamparo
desamparo y miseria en ambas manos
donde la mugre reemplazó las uñas
y te dejó una súplica amarilla.


Algo está por nacer del fuego

Recuerdas Víctor cuando el planeta hervía?
las rocas líquidas corrían por la espalda
y la piel nos gemía bajo el fuego.

Luego vinieron las lluvias, me sigues Víctor?
y el dolor se escurrió por las cunetas,
fue cuando la encontré bajo el paraguas
llevaba rosas despiertas en el pelo
y dos estrellas dormidas en el rostro

Era extraña!
Su risa era aguacero entre las hojas
y hablaba de planetas vecinos
de islas fascinantes pobladas de gaviotas.

El viento hacía surco a sus palabras
tu lo recordarás Víctor, aunque no estabas!
porque nosotros comimos peces azules
y una fruta espinosa en nuestro mar del patio.

El dolor no había nacido todavía ¿Recuerdas?
Ahora amigo perdona, la lluvia ha cesado
otra vez el sol se instala en mi cabeza
va buscando las piedras en su sombra.

Las hormigas arrastran su risa y sus palabras
otro volcán hace erupción en las espaldas
las islas fascinantes se disuelven como espuma

Sin embargo, no te vayas hermano todavía
serás testigo, algo late cercano
se oye un llanto.

Adiós a la sonrisa

Ayer se despidió de mi la sonrisa
arrastrando sus pies sobre las hojas secas
rumbo al pasado con pasos imprecisos
despertando temores insepultos.

Adiós amiga de noches bullangueras
huella borrada del rostro cotidiano
caricatura colgada en la corbata
mueca al turista llevada en el trasero.

Percibo su aroma en la distancia
como agua muerta desde antaño
sangre corriendo tras la muerte
olor a pólvora quemada.

Ayer se despidió de mi la sonrisa
dejándome la prensa sobre el lecho
noticias ensangrentadas de otras partes
la locura cabalgando a rienda suelta.

Niños empapados de calles y miserias
toneladas de plomo a las espaldas
dólares a La Contra, contra todo
maldita la sonrisa, por supuesto.


Homenaje

Meterte en la montaña comandante
un Caracoles frío de febrero
no fue el comienzo de tu muerte
sino el despertar de tiempo nuevo.

De ahora en adelante comandante
nadie podrá vestirse con tu capa
ni jugar con tu nombre a ser valiente
de ahora en adelante comandante.

Porque tu bota firme penetró en el lodo
del lado en que se pudre lo pudrible
y sin decir dijiste casi todo
hablando a la montaña por tu rifle.

De abril a Caracoles se durmió tu pueblo
nadie escuchó tu paso guerrillero
la culpa hoy nos punza comandante
y sembramos el mar de flores en febrero.

Las acacias mudas

En el mañana por el hoy de ahora
las acacias verán pasar la brisa
secarán sus espigas bajo tierra
para hacer silencio a las metrallas.

Con sinfonía de botas y tanquetas
la noche olerá a sueños muertos
la piel de las estrellas danzará sin rumbo
y Minerva pondrá su trono entre nosotros.

Los grillos mudos y azorados
oirán los metales de la orquesta
los acordes respaldarán la sangre
gloria a la muerte y la violencia.
Luciérnagas

Era la desnudez del cielo claro
estrellas en carne viva, sangrante
la brisa transportando girasoles
canto de grillos azorados.

La noche estaba irrumpiendo entonces
había sapos saltando a la deriva
almas bailoteando en los faroles
recuerdos cubiertos de rocío.

Eran las horas teñidas por el humo
en espirales de sueños colectivos
una noche poblada de oquedad
donde la nada trepaba hasta la vida.

Miles de sueños muriéndose a la sombra
especie extinguida poco a poco
restos de alas dejados entre las rejas
plumas sangrantes posadas en los tejados.

La ley del silencio llegando hasta las ramas
a los huecos de las palmeras frente al viento
nadie despierta las fantasías dormidas
cantos de plomo acunan sueños.

Y tan sonriente, sin embargo

Era tan perfecta su sonrisa
estaba allí flotando sobre la acera
desafiando el rugir de los motores
burlándose del smog y el griterío.

Ella, tan negra y tan sonriente
tan despeinada y tan sonriente
con la miseria pegada en el vestido
y sonriente hasta ser la sonrisa misma.

Sonreía y ya no había una esquina
ni un semáforo, ni bocinas ruidosas
estaba sólo ella, su sonrisa
una lluvia de perlas desafiantes.

De los labios le caía la risa desgranada
bailoteaba en sus senos con soltura
era ya ritmo en sus caderas
y se le escurría hacia el suelo vuelta lodo.

Entonces el polvo se tragaba los motivos
porque era tan pobre y tan descalza
tan harapienta y despeinada
y tan sonriente, sin embargo.

martes, 28 de octubre de 2008

Del Mismo Peso que la Sombra




Del mismo peso que la sombra

VENTANA I

Imagen diluida, caminante
alguien de paso siempre a ningún lado
hoja amarilla vencida por el viento
ave rara sin tiempo y sin espacio.

Algo como la brisa vagabunda
que despeina la hierba y los rosales
un aliento de nardos para nadie
donde solo el ocio deviene necesario.

Un pelotón de voces que se estorban
el grito destrozado entre las rejas
y donde corrieron la vida y los motivos
hay solo un nombre tendido en los escombros.

La nada es el resumen de la historia
cosas del mismo peso que la sombra
sueños que sueñan bajo su propio espacio
donde a veces ni duele la esperanza.



Una Hoja Seca


El viento dejó en mis manos una hoja seca
de piel quebradiza y francamente triste
eso, una hoja seca en mitad del tiempo
definitivamente seca y para siempre.

Tiempo hubo sin embargo
cuando el rocío se dormía en su espalda
las mariposas reposaban en su alfombra verde
y las raíces se asomaban para ver el viento.

Más aun, mucho tiempo atrás
la hoja estuvo en los umbrales de lo verde
era una del brote y como el brote
del color de una tarde que se duerme.

Tal vez antes del ámbar de los brotes
fue tan sólo un proyecto, la semilla
una vocación creciente en la llovizna
el ente que despuntaba sigiloso.

Y antes de todos los antes de ese tiempo
esta hoja desprendida de la vida
quizá fue parte de la infinitud pensante
o un amor que aleteaba en algún lado.


Sucede a veces

Sucede a veces, algo te duele tan adentro
entonces te detienes en eso que te duele
y quieres llorar a espaldas de testigos.

Tú sabes que los motivos son enormes
en el alma se amotinan las heridas viejas
los surcos dolorosos de otros tiempos.

Los amigos muertos o exiliados
el más grande amor siempre perdido
la madre que a veces duele en algún lado.

Lloras, lloras... y el motivo te parece claro
pero tus ríos interiores se desbordan
el recuerdo es un pretexto necesario
y retoñan las penas milenarias.


Bajo Los Ecos De La Guerra

Pienso en ti, bajo estos ecos de la guerra
siento que la muerte no será la norma siempre
aunque nos sea preciso interrogar una rosa
y asir su tallo con fuerza para sangrar un poco.

Ellos cabalgan sobre el sinsentido
levantan polvoreda en el desierto
ordenan el silencio de las aves.
Los pájaros asustados enmudecen
y el rumor de la sangre llena todo.

Por eso pienso en ti amante de la paz
con el brazo extendido sobre el surco
con el cuerpo salobre de fatiga
y la esperanza raída sobre el cuerpo.

Te imagino respirando más allá del mundo
con ese olor de frutas tropicales
destellos luminosos de sonrisas
y trazos de esperanza sobre el sexo.



Por Ventanas De Orégano y Cerveza


En el corazón joven de la noche
tengo la estatura de un extraño
las mesas me miran sin malicia
y tras el humo indeciso del cigarro
el parroquiano me parece innecesario.

Afuera está el mar, lo imagino espumoso
pero no lo veo ni me huele a nada
los autos pasan más allá del cristal
y con sus ojos dan vida al asfalto
herido por las sombras y el acecho.

Cerca crece un niño en la mirada
la historia se le escurre entre las piernas
la copa se ha sentado frente a mí
y algo se cuece en un lugar cercano
a ritmo de cacerolas y sazones.

Una porción del mundo me agrede en el instinto
aniquila mi vuelo en sus cimientos
bloqueado queda el puente hasta tu nombre
y el aliento se escapa del poema
por ventanas de orégano y cerveza.



Desde Mi Espacio Incierto

Esta noche se duerme tan serena
pero, ¿quién sabe?
alguien se suicida en este instante
otros emergen del orgasmo sudorosos
y una ventana es violada en el silencio.

No los veo, y sin embargo
florecen los borrachos en las calles
los cigarros hundiéndose en las manos.
Ella es tan tierna desde el sueño
y la luna se escapa del encierro.

El devenir se teje indiferente
un niño podría existir o no
en colchas vaporosas extraviado
o acunado en el frío de la noche.

Nadie existe o perece para nadie
ente y espacio podrían ser inciertos
como el hueco de la ventana donde miro
y anónimos andantes de algún lado.

Con La Risa Cautiva En Las Fronteras

Cualquier noche llueve sobre la ciudad
y las calles son ríos luminosos
donde los autos dejan su estela transitoria
y el peatón se disuelve a pocos pasos.

Cualquier noche o cualquier día
en un instante breve o en horas infinitas
llueve en la ciudad o entre las lomas
o simplemente se percibe el tedio.

Está en los techos la lluvia detenida
el aire enrarecido en cada espacio
el discurso que fluye hacia el silencio
y eterno entre los dedos, el cigarro.

Se instala el tedio en ese instante
los sueños ceden su espacio poco a poco
es el trajín del tiempo sin sentido
que cosifica el aire y los motivos.

Las flores están tan lejos de nosotros
que su olor se diluye en la distancia
la risa queda cautiva en las fronteras
y la nada es el todo de los hombres.


Solo el Llanto

El hombre miró al cielo
el humo entorpeció sus pasos
trepo por el sueño lentamente
y miró desde lo alto la tristeza.

Anduvo a tientas sobre el lomo de la tarde
tropezó a ratos con raíces de la lluvia
sintió humedad corriendo por su espalda
y siguió sin rumbo siempre andando.

Le sangraban los pies y el pensamiento
la llovizna era roja en los tejados
las ondas del olvido se expandían
y del hombre trascendía solo el llanto.


VENTANA II


Ahí están esas vainas

Ahí están esas vainas resecas de la acacia
parece que nada tienen en común con nosotros
ellas desnudan su risa al pasar el viento
la nuestra va de luto hace algún tiempo.



Nostalgia

Cuando fui una hoja verde
me alimentaba con la savia fresca
no lo supe entonces, sin embargo
era verdemente feliz en ese instante.

Pero el árbol se olvidó de mi
su savia corrió hacia hojas nuevas
lo amarillo se durmió en mi espalda
y una tarde la brisa me llevó en sus alas.

Con cabriolas torpes inventé un camino
y quedé a sus pies disimulada
envidiando sus copas danzarinas
anhelando el retorno hasta sus ramas.


El Grito De La Sangre Nos Convoca


Debo escribir algo, para ti supongo
aunque no estás, según parece
lo denuncian los muebles de la casa
y ese algo que me duele en algún lado.

Podría callarlo todo si quisiera
ninguna ley reclama mis palabras
y mi albedrío duerme sereno sobre el prado.
Es preciso escribir, así lo siento
al menos para mí, y para ti supongo.

En todo caso nada habrá de oficial
serán solo sonidos contra nada
imágenes sonoras marginales
brotes tan prescindibles como el llanto
creciendo en un costado del descuido.

Deberé apostarlo todo a la inocencia
pues, si la malicia hiriera mis palabras
ventilaría mis iras y las tuyas
relataría la historia y sus testigos
encendería la disputa ya extinguida.

Porque el mutismo deviene lo certero
aguardaré en la gruta del discurso
y anidaré un poema en el silencio
con palabras redimidas del enfado
y sin rastro de sangre en las sandalias.

Esas palabras arrancadas del pasado
se ceñirán como laureles a tu frente
deshojarán rosas amarillas a tu paso
y condensarán la estatura de tu nombre
sobre el viento inventado del recuerdo.


Se impone discurrir dejando las alcobas
obviando lo tangible por completo
mirar cauteloso lo oscuro de las cosas
y excavar heroísmos del fracaso
a costa del olvidar el propio nombre.

Tú conoces bien cada motivo
soy predecible como las estaciones
pendo indefenso del pasado
como pende la araña de su urdimbre
y eres tú el testigo ineludible.

Nacimos por la herida sangrante de la historia
conocimos el plomo caliente todavía
nos bebimos el llanto propio y de los otros
salvando nuestra cuota del hastío
y pastoreando la pena en nuestra hacienda.

Estuvimos justo en el lugar previsto
para ver el viento humillar los rosales
el crujir de las estaciones ya gastadas
y tejer con lágrimas los sueños
pasando por carriles virginales.

Nos es común un trozo del camino
algo hay de nosotros en cada mariposa
la concha del mundo nos alberga
y el grito de la sangre nos convoca
a una espera infinita bajo el tiempo.


Sobre La Mesa De Los Sueños

Un hastío de flores en el suelo
tiradas de bruces sobre el polvo
extraviadas del rumbo de la vida
y sin nada que mueva su retorno
duermen como mi amor en el olvido.

El fruto quedó atrapado allí
sin alcanzar las puertas del sentido
como algo que quiere ser desde lo hondo
y aplastado bajo el peso de una estrella
se hunde en la espesura del abismo.

Más allá de ese mar de flores muertas
se atrinchera el pretexto necesario
un pecado inconcluso a que se aspira
y la sangre caliente que se escurre
del grito dormido al filo de una espada.

Está cerca y lejano de las manos
helado en los repliegues del sendero
mojado en el instinto más remoto
y se sorprende en el instante insospechado
que hierve en los tejidos del deseo.

En las flores dormidas va mi grito
como apuesta por levantarse desde el polvo
madurar bajo el influjo de la savia
y como fruto pleno, disputado
rodar sobre la mesa de los sueños.


Con El Pecho Lleno De Claveles

Mientras los ruiseñores quebraban el cristal del día
en tu alma nació la palabra distancia
y te fuiste volando como el viento.

El quedaba nadando en el olvido
esperando por ti seguramente
sin embargo no regresarías,
eso creías entonces
y lo seguiste pensando en el encierro.

Pero ¡cuánto lo quisiste a diario!
hasta el día de hundirle el mental en la garganta
su pecho estaba lleno de claveles
eran para ti según pensaste
porque lo amaste tanto en ese instante
que era preciso no perderlo
sus raíces crecían en tu alma
tan profundas como el rastro del acero.

Luego de años regresaste
y ya no había claveles en su cuerpo
sólo su aroma impregnaba todo
y su huella reciente en cada cosa
sus zapatos llenaban los rincones
las telarañas eran su voz hecha materia
estuviste más segura entonces
no se iría jamás, lo amabas tanto
que el sería tú sombra para siempre.


Gracias Amor Por No Quererme


Gracias amor por no quererme tanto,
mejor aún, por el silencio de tus manos.

Si me quisieras tanto, tanto, tanto
que tus manos anudaran ternuras en mi espalda
y tus besos corrieran con sed hacia mis labios
yo sería tu siervo inexorable.

Por eso es que te quiero así tan silenciosa
tan gris como el clasificado de los diarios
mi amor navega libremente por tus aguas
le permites servirse el trago acostumbrado
quitarse el calzado y la camisa
en fin, suplirse a mano propia las faltas cotidianas.

Así, si te quiero es solo por eso
mañana, si te vas, serás tan generosa
que no dejarás huellas de tristeza.
Mis cicatrices no serán tu culpa
ni habrá oquedad doliente por tu ausencia.

Amaré el feminismo en tus detalles
tu pelo siempre al descuido impredecible
tus gavetas ausentes de colores.
También querré tu acento campesino
tu sexo bañado en aguas inocentes
y su fin maternal ineluctable.

Gracias amor por no quererme tanto
por tu imparcial disfrute de las cosas
por no fijar frontera al albedrío
por no quererme tanto como quiero
y dejarme así, como sin dueño.

Bajo Un Tropel De Trinos

En tu lugar creció frondosa la soledad
ensanchó su tronco sin fronteras
y en sus ramas de la estatura del insonnio
miles de pájaros se deshacían en llanto.

Entonces esperé la madurez del tiempo
su paso disipó el eco de su risa
la lluvia hizo lodo el polvo de su huella
luego soñé bajo un tropel de trinos.

En mi sueño la lluvia fue un torrente
los árboles se hundieron poco a poco
las aves dolientes volaron sin destino
y el ramaje podrido se desplomó en silencio.

Ahora despierto y veo caer la lluvia
los árboles son grises en la distancia
alguien cruza la calle en este instante
sonrío, pero algo me duele en algún lado.


Inventario

Hoy se nos acaba el tiempo
todo fue tan fugaz
no hubo espacio para los sueños.

Solo ha quedado eso:
una vaga estela luminosa
un par de lágrimas.

Nos quedaron más de veinte rostros
un manojo de sonrisas
y quizás una esperanza.


Tiempo Desnudo

Emigrada por fin la última garza
todo el tiempo me quedó en las manos
sin ninguna forma, derramado
sin atributo alguno, sólo el tiempo.

El espacio se ha ido con las garzas
el día fue arrancado desde el alba
se llevaron los árboles y calles
y barrieron la estela de los astros.

Tiempo desnudo y sin fronteras
ni vestigios quedaron de las cosas
la sangre es la unidad del tiempo
increcendo constante de un latido.

Minutos afiliados hundiéndose en el alma
más allá de las horas sucumben los motivos
tu imagen misma se disuelve
y se agotan los últimos testigos.

Desde ahora y para siempre
no habrá destino para los recuerdos
apagado estará el faro en tus dominios
y debajo del tiempo solo niebla.



VENTANA III


TRINOS

Los pájaros saltan en las ramas
se hacen libertad en cada trino
tus manos recogen los trinos desprendidos
y vuelan libremente con las mías.


Mujer

Cuando la ternura dejó de ser palabra
fue mujer dormida sobre espumas
y anduvo descalza por la playa
recogiendo estrellas extraviadas.

Mujer definitiva, para siempre
en mitad del viento con sus hojas
sobre el humo disperso de las calles
entre el ruido y la calma de las cosas.

Mujer en espirales infinitas
con almendras dormidas en el rostro
con la vida presente en todas partes
y la gracia situada en algún lado.

Mujer, eco detrás de las fronteras
espacio a la imaginación posible
voz derramada y fresca como lluvia
y un signo que la nombra, la ternura.


Vocación de coral

Si fuese un coral del fondo marino
alzaría mis ojos cubiertos de espumas
buscaría con ellos tu mirar de estrellas
y retendría sal para ungir tu cuerpo.

Si fuese un coral del fondo marino
dejaría entrar peces fugitivos
abriría grietas a los calamares
y juntaría nubes para armar tu sombra.

Dejaría volar mi voz a tu puerta
cargada de sales entraría a tu casa
llevándote algas y estrellas de mar.

Con besos de espumas sobre tus cabellos
bajaría con prisa por todo tu cuerpo
y diría tu nombre tendido en la arena.


PARA BEBERSE EL SOL A TRAGOS LARGOS


Debiera cantar junto a la fuente
mezclar mi voz con el agua fresca
desafiar a las aves de los bellos cantos
ha llegado el día de pastorear sueños

Quiero beberme el sol a tragos largos,
llenarme de luz sobre las calzadas
pintar el tiempo de colores vivos
ser un arco iris allá en la montaña

Hoy todo mi cuerpo es un gran oído
oigo los tambores cabalgar veloces
un rumor de las olas impone ternura
un corazón loco se pierde en las voces.


FRENTE AL MAR


Aquí frente al mar pensando en tus manos
las olas acercándose hasta mí
son mil brazos marinos extendidos
devolviendo la vida a los corales.

La tarde está naciendo en la bahía
el yodo se pasea por la brisa
estoy pensando en ti, en tu ternura
tu nombre es un reflejo en la distancia.

Debo pensar en ti mi bienamada
donde las olas son como tus labios
húmedos de vida para el beso
o multitud de brazos ondulados
ciñendo con espumas mis arenas
y mi mano desnuda te dibuja.


MOTIVO DE ESTOS VERSOS

Yo sé que eres el motivo de estos versos
aunque hable de una ola en el mar lejano
una ola fosforescente donde la luna tiembla
y se esconde después entre la arena.

En lugar de estos versos debe estar tu nombre
porque eres como una sucesión de olas
que mueren en mi playa a cada instante
y vuelven a brillar bajo mis lunas.

A veces despierto con estrellas de mar entre las manos
con algas marinas enredadas en el pelo
los bolsillos repletos de arena y caracoles
la mirada acuosa y rastros de sal entre los labios.

Ciertas noches camino contigo sin saberlo
te oigo respirar y crece el eco de tus pasos
vas ocupando el sitio de mis sueños
y floreciendo en mis instintos más remotos.


PROYECTO DE VERSOS PARA UN AMOR SITUADO

Cuando su verso toque a la ventana
esta tarde, o quizá al caer la noche
le responderá tan solo el silencio
y creerá sin duda que su amor ha muerto.

Nadie podría entender entonces
que late el amor bajo todo el hielo
un ave dormida hasta la mañana
un ruiseñor mudo entre los barrotes.

La estrofa se aplasta en la depresión
neurotransmisores anuncian su muerte
pero el verso sigue velando su sueño.

Un reto a la tristeza neuroquímica
porque tras las fronteras de la noche
la ternura se esconde y él lo sabe.


MAS ALLA DE SUS MANOS

Fácil es amar sus labios tiernos
recoger de sus ojos la ternura
anudar el cariño a su cintura
cosechar el misterio de sus manos.

Es la excelsitud del ser humano
una corriente veloz en la cañada
canto del ruiseñor de madrugada
brisa montez corriendo por el llano.

Como la flor cubierta de rocío
mariposa flotando sobre el viento
amor que cambia el curso de los ríos.

Calor cercano para ahuyentar el frío
hace saltar el corazón contento
al presentir que morirá el hastío.


TU NOMBRE SE IMPONE CONTRA TODO

Bajo escombros de cotidianidad tremenda
más allá de la ineludible cercanía
en mitad del universo compartido
hay un amor insospechado y fresco.

Las ondas expansivas del barullo
La asechanza del tedio impenitente
el rugir del sinsentido galopante
dejan intacto un te quiero en mis dominios.

Tu nombre se impone contra todo
a pesar de las nubes del silencio
de mi paso torpe por tu espacio
y la costra del mundo que me embota.


NACIDA EN ENERO PARA SIEMPRE

En algún lugar del mundo habría nieve
gente caminando bajo abrigos grises
aves amorradas en las ramas desnudas
y niños tiritando al desamparo.

Bajos las alas extendidas del invierno
la vida seguía fluyendo sin embargo
las parturientas sembraban de llanto la esperanza
y la savia de trenes nutría las estaciones.

Aunque era invierno en todas partes
el trópico se aburría de verde, como siempre
los ruiseñores dormían de trinos los naranjos
y las flores se recostaban contra el viento.

Entre tanto nacías en enero para siempre,
los fusiles florecían en la sierra
el temor de los tiranos se extendía
y un proyecto de pan parecía cierto.

Nacías en enero, como he dicho
una espiga cubierta de rocío
con las manos repletas de luceros
y la gracia ceñida a la cintura.


COMO EL AGUA

Eres un río de caudal profundo
con la vida besando las orillas
coronada con multitud de espumas
majestuosa en el discurrir, serena.

Eres como la lluvia en primavera
fresca, empapada de rosas, perfumada
su cadencia sigue el curso de tus huellas
fértil como tu voz de compañera.

Como el mar hecho pedazos en la arena
frágil como la sal en los corales
tu vida se hace beso en la gaviota.

Eres profunda detrás de tus fronteras
más allá de las costas de ternuras
tus manos tejen alas y esperanzas.



PARA SEGUIR ANDANDO

Aunque bregue con lo duro de estas horas
y me asalte artero el desencanto
siento el deber de andar
y pienso en tí
para seguir andando.


CANTO PARA EL HOMBRE QUE NO CUENTA

Cuando eras posibilidad apenas
la palabra casabe se extendía sobre los burenes
el fresco de los bosques llenaba los bohíos
y el olor a pescado flotaba en las cocinas.

Tú no habías nacido del todo
y esta era una isla casi verde
casi virgen
casi buena
y totalmente nuestra y de los nuestros.

Ahora que te miro ahí, encorvado
con el cuello ceñido de piedrecitas negras
con el cristo agónico sobre el castillaje
pienso que antes no existías.

Sólo había bandadas de pájaros sin dueño
y el mar yéndose siempre y regresando
la gente olía, como huelen los árboles
y los caminos eran cicatrices recientes.

Te veo apoyado en el cabo de la azada
mientras tu sombra te mira desde el polvo
es una imagen quebrada sobre el surco
y más triste que tú, aunque no creas.

No sospechabas que estarías ahí
pero, si alzas los ojos para mirar conmigo
tropezaremos con el génesis todavía caliente
y la inocencia andando sin calzados

Todo se hizo después que ellos vinieron
le vimos calzar la isla con sus botas
humillar las caobas centenarias
hacer brotar el oro de grietas vergonzosas
y ahuyentar los cemíes protectores.

Ellos escribieron la historia que conoces
como sabes, la escribieron con sangre
luego se marcharon con el botín del huerto
dejándonos un hueco donde estuvo la isla.

Pasó hace mucho, tu azada no existía para entonces
por donde se fueron las olas perecieron
un olor a algas corrompidas los devolvió a su casa
dejando tras de sí un camino estéril.

Por esa senda después vinieron otros
y por la misma ruta luego los de ahora
entre todos se acabaron de llevar el hueco
y nos dejaron, como ves, casi sin nada.

A ti, por ejemplo ¿qué te han dejando?
sólo la azada donde ahora reposas la barbilla
harapos desteñidos por el agua salobre
y la sombra quebrada sobre el surco.

Ahora, cuando te veo así, tan inocente
pienso en los bucaneros de ayer tarde
en el Faro a Colón de esta mañana
y la mente no me alcanza para pensar más lejos

Ellos, los de antes y los de ahora
pretenden no saber que estás aquí
con la mirada perdida sobre el suelo
como si pensaras en algo trascendente
o te comieras el cabo de la azada.

Ahora, cuando te veo así, tan vulnerable
me entran ganas de estar en tu cabeza
abrirme paso entre tus pensamientos
y recorrer tu historia palmo a palmo.

Ahora que te veo así, tan triste
quisiera imaginarte sonriendo
con el azul llenando tu mirada
y sobre el azul, una gaviota.



RASTRO DE UN SUEÑO

Voy siguiendo el rastro de ese sueño
su olor a lluvia me orienta en el espacio
alma adentro venciendo la fatiga
discurro sigiloso como el viento.

Abro las cortinas del llanto envejecido
y cruzo el eco detenido de mil voces
llego al silencio rotundo y misterioso
donde su nombre es una huella fresca.

Presiento la orilla aunque lejana
donde el sueño deambula por el bosque
se envuelve en el canto de los grillos
y se duerme en el limo de los ríos.

Presiento la orilla, ahora más cerca
los cristales de luz hieren mis pasos
en las costas del alma la sangre se detiene
y más allá de todo languidece el sueño.


EN EL ESPEJO DE MIS OJOS FIJOS

Detente ante mi puerta
ave rara de plumaje extraño
cruza el espejo de mis ojos fijos
y asiéntate en un lugar del alma.

En una estación cualquiera
busca mi nombre oculto en los escombros
desentierra las huellas de sus pasos
y tiéndete a la sombra del recuerdo.

No hallarás un río tumultuoso
solo cuencas vacías y lechos pedregosos
peces de bronce dormidos en los andenes
y aves zancudas por siempre detenidas.


UN CAMINO PARA EL SUEÑO

Ascendiste por el humo de la tarde
ahora estás ahí
justo detrás del ventanal
llenando con tus pasos los templos del silencio.

Atrás quedaba el rastro de tu sombra
herida abierta al flujo del perfume
senda de polvo tejida por el viento
huella imprecisa del vuelo de tus manos.

Más allá, se alza tu reino sobre el agua
en la vasta llanura de las sombras
donde no hay palabra que te nombre
ni espejo que detenga tu mirada.

Dormida a la sombra de una estrella
mecida en las espumas del recuerdo
donde el sabor de sal se desvanece
y azules son las alas de la ausencia.

Estás ahí seguramente
en el lugar que se sustrae al tiempo
más allá de esa niebla del deseo
inventando un camino para el sueño.


CUANDO UN NOMBRE DUELE

Por ventanas de otoño vi escapar las hojas
árboles enteros y sus raíces
infinidad de pájaros huraños
y alguna mariposa de colores.

El universo se escapaba todo
el mar se deshacía en surtidores
un pañuelo agitado por el viento
y la tierra fue luego polvo estéril.

Quedaban solo ventanas del otoño
y un hueco desmedido ante mis ojos
trozos de hielo rodando por mis venas
y un nombre me dolía en algún lado.



HUESOS SOBRE EL PRADO

Un grillo se oculta en la maleza
su canto abre grietas en la sombra
calla luego, y para siempre
la noche sangra por el hueco de su canto.

El hombre emerge de la senda insospechada
lleva en sus ojos despojos de tinieblas
los pies ahogados por brotes de rocío
y con restos de alma entre las manos.

Más allá, el horizonte detiene la distancia
las palomas manchan el alba con sus alas
y el hombre, ante la urgencia del llamado
ha olvidado sus huesos sobre el prado.


LA ROSA INTACTA


Tiempo, mucho tiempo atrás
tal vez en el origen mismo
así como al descuido
deshojé una rosa en la corriente.

Como a vagones perezosos llevados por la inercia
vi a los pétalos rodar por el torrente
y jamás hubo otra flor entre mis manos.

Corazón polvoriento y el alma despojada
han rodado por años incontables
pero esta noche precisa y milagrosa
bajo el puente olvidado del recuerdo
va pasando serena aquella rosa.